Carnal, la nueva steakhouse de Vitacura
El restaurante es realmente acogedor y moderno, con una zona principal - junto a la barra en la que se preparan los cócteles - que se abre a la terraza sobre Alonso de Córdova. Quizás esos sillones vayan a dar mucho calor durante el verano. La carta presenta entradas y ensaladas, una sugerente sección de raw bar y, por supuesto, la propuesta de carnes.
Ya casi diciembre, el sol apretando, preferimos entradas frescas. Llegó el tártaro de salmón, tersa y jugosa la carne, tímido el aliño, lo que lo dejó algo insípido. Esa misma timidez, en cambio, permitió que la carne de Angus brillara en el otro tártaro, el de vacuno, dejando muy claro por dónde va la apuesta del restaurante.
Y es que las carnes son realmente de una calidad fantástica. Tiernas, tiernísimas y con ese punto de grasa entreverada que ayuda a que se deshaga en la boca. La entraña es soberbia, a la altura de mi favorita en Santiago (la del Cívico de La Moneda). El solomillo, pura mantequilla. Las cocciones son un tanto conservadoras: tanto la inglesa de éste como el punto de aquella estaban al límite de no serlo. Igual que el de la generosa hamburguesa - con cheddar, tocino, tomate y cebolla - que devoraron los pantagrueliños.
Algo más audaz es la carta de vinos, que nos permitió elegir un Trabún Syrah, alrededor del cual había alguna que otra propuesta interesante adicional. Para el postre, bien rica la french toast o torrija en buen castizo, quizás con un exceso de canela. El servicio requiere los ajustes normales con apenas alguna semana funcionando.
En fin, ubicación inmejorable, local ondero, carnes excelentes y conservadurismo en punto y aliños, probablemente como corresponde a la zona. Los precios, altos, acordes a la calidad de la materia prima y del entorno. Diría que Carnal tiene todos los ingredientes para triunfar.
[Carnal Prime Steakhouse / Alonso de Córdova, 3053 - Vitacura / Ubicación]
(La foto de la sala está tomada del Facebook del restaurante)
Madre mía, que pinta más buena!
ResponderEliminarBuen trabajo!
Sana envidia....
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