El de Alberto (A Coruña): cuando las segundas partes sí son buenas
Frente al frenesí ornamental de O Bebedeiro, El de Alberto presenta una decoración sobria en su pequeña sala con capacidad para 25 comensales (a la que se añade, a la entrada, un pequeño espacio con cuatro mesas altas): paredes de paños lisos, rojos o blancos, con algo de madera; el suelo, de pizarra; el mobiliario y la mantelería también en madera, rojo y blanco; la vajilla mucho más cuidada.
Por el contrario, la carta presenta una estructura muy similar a la del clásico coruñés, con predominio de los entrantes. Una declaración de intenciones es el apartado “las recetas de mis padres”, que recoge varios de los platos de siempre (racatuli, vieiras, scampi), aunque existe presencia de novedades interesantes. En los principales, carnes y pescados, hay buenas opciones.
Ayudados por Alberto, la Sra. Foucellas y yo nos decantamos por una degustación de entrantes que fuimos compartiendo, con un arranque tradicional que fue incorporando novedades in crescendo. Para abrir boca, el racatuli, ese delicioso salteado de verduras (calabacín, pimiento, berenjena, champiñón, cebolla...) con gambas y cubierto con un gratinado de queso que tantas veces tomáramos en el local vecino. Y que no se pierdan las costumbres: la ración llega en su propio plato o fuente y Alberto lo sirve a cada comensal.
Seguimos con un dúo de tostas. La primera muy rústica, muy rural, con un pan grueso y áspero, chicharrones de pato y queso de tetilla. Limpiamos el paladar con un refrescante helado de verduras y cítricos. Y, frente a la rusticidad, la sutileza de la mermelada de tomate y el queso de cabra. Buen contraste.
Llega una generosa ración de pulpo a la plancha con langostinos, casi los últimos grelos de la temporada y espuma de patata. Notable el punto y el sabor del conjunto, aunque el poderío del trío pulpo-grelos-patata no le deja sitio a los langostinos, para mí de más en el plato.
La expectación era alta ante la llegada de los ravioli de lacón con crema de grelos y crujiente de chorizo, por el evidente recuerdo al plato de Flavio Morganti. La preparación es bien distinta, pero muy resultona: la pasta clásica viene rellena de lacón y grelos; ya en la mesa, se termina la presentación incorporando al plato la crema de grelos; aparte se deja el crujiente de chorizo, que te pide insistente mojarlo en la crema hasta que lo termines.
Novedoso y original el postre. Un trampantojo de los que a mí me gustan: café de pota. En un pequeño puchero rojo, un juego de tiramisú, con un fondo de gelatina de café, una mousse de orujo y espuma de leche cubriendo, servida al momento con la cafetera de la barra. Notable y divertido final.
Para otro día – porque habrá bastantes más – dejaremos la prueba de los principales. Vimos pasar cerca un estofado de rabo de toro o un sanmartiño muy prometedores. Igual que vimos pasar scampi y vieiras, de los fieles a sus gustos de siempre.
Al café de pota de verdad nos invitó la casa. Y acompañamos con una botella de Refugallo (D.O. Ribeira Sacra, el básico de Dominio de Bibei): la carta de vinos es muy clásica y de precios ajustados, con predominio de riojas y riberas, aunque con algún espacio – sin alardes – para otras D.O. En total pagamos unos contenidos 54 euros, a 27 por cabeza. Optando por principales la cuenta subiría, si bien creo recordar que ninguno superaba los 20 euros.
En fin, que me sorprendería muchísimo que este local no triunfara. Parte de una clientela muy amplia, de un concepto para una gran base de público, de un precio razonable y de los suficientes toques novedosos para que no resulte un “esto ya lo he visto”. Y es que treinta años de oficio son treinta años de oficio.
[El de Alberto / Angel Rebollo, 18 - 981.907411 / Ubicación]
Toque bebedeiro 100%:demasiada bechamel ,demasiada crema-nata,demasiado queso...sin el local rústico que siempre tiene su gracia.Braintraining
ResponderEliminarQue engaño!!! Cuando yo también pensé que era un segundo local del Bebedeiro! Confirmado, no es del Bebedeiro, es una copia!! Llamé al Bebedeiro para reservar mesa y tenían completo, entonces le pedí para "el de Alberto" y me sorprendió la respuesta: "No tiene nada que ver con nosotros". O sea, un ex-empleado monta un local a cincuenta metros y copia la carta? y sin el encanto del Bebedeiro? Eso es bueno? PARA MI NO!!!
ResponderEliminarLa verdad es que no sé si copia la carta o era el cocinero, uno de los socios o qué, pero lo cierto es que el estilo es similar. ¿Engaño? No sé por qué, en ningún sitio vi referencia a O Bebedeiro.
ResponderEliminarBastantes cosas interesantes y un bacalao con una muselina muy conseguido. Además, buenas referencias de vino y con precios ajustados.
Por cierto, se comentaba la opinión del señor Pantagruel y este post en alguna mesa vecina.
Creo que Alberto es uno de los hijos de los dueños de O Bebedeiro (de hecho esa referencia a las comidas de mis padres lo confirma). Ahora bien, si se ha ido por desaveniencias con ellos o no, lo ignoro. Y no es asuno mío. Lo que está claro es que muchos de los platos de la carta son exactamente los mismos. Incluído ese bacalao con muselina que a mí también me encanta.
ResponderEliminarSaludos.
Sí, sí: se trata del hijo de los padres ;-). Vamos, el que llevaba toda la vida atendiendo en el Bebedeiro.
ResponderEliminar¿Si es bueno o no que monte un negocio similar? ¿Si ha salido bien o mal del anterior? Pues, francamente, me es inverosímil en ambos casos, que diría el otro.
Melvin, ya nos contarás qué se comentaba...
HOLA MEPRESENTO ME LLAMO RAMON SOY AMIGO DE ALBERTO DESDE HACE AÑOS Y YA HE ESTADO VARIAS VECES EN SU LOCAL NOVOY A VENDER SUS PLATOS ESO ES APARTE PERO SI VOY A DECIR PUNTOS QUE NO SON CIERTOS PRIMERO EXEMPLEADO NADA EL DUEÑO CREO QUE 30 AÑOS.LOS PLATOS QUE HAY IGUALES SON POCOS DE 25 HAY CUATRO POR LO TANTO COPIA NO CREO, Y ADDEMAS COPIA COMO COPIA SI EL Y SUS PADRES SON LOS QUE LOS ELABORABAN DESDE EL AÑO CATAPUN QUE ES COPIAR ESA ERA SU COCINA Y LA DE LOS HOMENAJEADOS ENSUCARTA POR LO DEMAS EL LOcAL NO SE PARECE EN NADA Y ULTIMO EL NACIO EN ESA CALLE O EN LA DE ABAJO AH Y ME OLVIDABA ENGAÑO EN QUE UNPOCO FUERTE ESA ACUSACIONY MENOS SINSABER QUE YO SEPA POR LO TANTO NO COPIO LA CARTA Y NO ERA UN EX EMPLEADO SI NO QUE JUNTO A SUS PADRES FUE EL DUEÑO DURANTE MUCHOS MUCHOS AÑOS APARTE DE COCINERO Y CAMARERO POR LO TANTO SEÑORES SEAMOS SERIOS Y HABLEMOS CUANDO ESTEMOS SEGUROS GRACIAS A MELVIN POR SER JUSTO PUES EXACTAMENTE NO HAY NINGUNA REFERENCIA A O BEBEDEIRO SOLO UNA COSA MAS SERIEDAD
ResponderEliminarPrecioso el lugar, ejemplar la atención de Alberto,parecía que ibas todos los días por su local; la comida en general buenísima,sí ,recordando la de sus padres pero honra merece el que a los suyos se parece y quizás raciones un poco escasas y precios un poco elevados en proporcioón.
ResponderEliminarManuel, yo tambien soy hijo de mis padres....:)
ResponderEliminarREspecto al Bebedeiro, lo que ha pasado es que la familia que lo creó, entre los que está Alberto, lo vendieron hace dos años y ahora Alberto ha montado otro proyecto.¿Como no se van a parecer?
Le deseo la mejor de las suertes.
Hola, yo no soy quien para profundizar en el entramado de quien era quien y quien es ahora (por que lo desconozco), lo que pasa es que si haceis como yo, me leo el anterior reportaje (supongo que se habló con Alberto para publicarlo) y solo con el título y las cinco o seis primeras líneas se entiende que es del Bebedeiro. Por otro lado (según se comenta por aquí) si mis padres tienen un negocio como el Bebedeiro, y lo venden (que no me lo dejan a mi) y montar uno al lado utilizando parte de su "cocina"... Pero bueno, estamos divagando todos, nos estamos saliendo de lo que verdad se pretende, que es salir y degustar ricos platos. Un Saludo
ResponderEliminarAún no lo he probado pero estoy deseándolo. Alberto lleva toda su vida ofreciéndonos unos fantásticos platos sea donde sea o llamese como se llame, y atendiéndonos siempre con una gran sonrisa, haciéndonos sentir como viejos amigos... deseo que le vaya bien, deseo que triunfe, porque siempre, desde hace años hasta hoy en dia, ha tratado a la gente con maravillosa atención y cuidado. Y qué decir de sus platos... inmejorables.
ResponderEliminarHola Manoel y hola a tod@s:
ResponderEliminarLlevo tiempo queriendo compartir en tu blog mis opiniones (y las de mi señora, que es quien me suele acompañar) de los sitios que visitas, describes y comentas, y hoy, por fin, me voy a arrancar. Antes de nada, que sepas que por lo general, coincido bastante con tus pareceres, las críticas que aquí publicas me han parecido casi siempre muy útiles y veraces, por lo tanto, tengo una confianza bastante alta en los locales que recomiendas, y pocas veces me han decepcionado los resultados de seguir tus indicaciones.
Recientemente he probado el de Alberto, y mi opinión es que me/nos ha gustado. Se parece al Bebedeiro bastante (ya veo que es de lo que más se critica por estos lares) pero es que como ellos mismos reconocen, no sé si porque son sabedores de la comidilla general y ya se justifican antes de recibir críticas por ello, su padre y él han estado 30 años cocinando en esa cocina tan admirada y querida de nuestra ciudad. Ante eso, qué esperar, más de lo mismo, en la misma línea y con el mismo buen gusto, detalle y dedicación que su local vecino. Qué cambia? Que el restaurante no es una adega, no está decorado como tal (y tenemos que reconocer que las lámparas de pared, nos han parecido bastante feas y desentonaban con el resto del local, y las críticas constructivas son necesarias para mejorar no pretendemos otra cosa)y poco más.
Los platos, aún teniendo su propia firma, son parecidos a los de O Bebedeiro (qué mas necesita la gente para asociarlos que el detalle de nombrar a sus progenitores en la carta?) y por lo tanto, igual de exquisitos.
Todo lo que probamos nos ha gustado: la ensalada templada de cecina, el pulpo con langostinos y muselina, los scampis, las carrilleras, el rape, el entrecot.....Los entrantes, excelentes; los pescados, impresionantes, bien de cantidad y de punto; las carnes, más de lo mismo, piezas sabrosas y bien preparadas. Las cantidades son abundantes, muy bien presentados los platos y el trato excelso. Y los postres..... verdaderos regalos para los larpeiros.
La carta de vinos, como comentas, decente y de buenos y ajustados precios. Siempre hemos acompañado las cenas con ribera del duero por copas, del cuál no sabemos nombre, pero era el que servían en la barra. Estaba más que aceptable. Es lo que tiene no acompañar la cena con toda una botella. Con una copita de acompañamiento, a nosotros nos llega.
Y el precio, nuestro parecer es excelente. No salimos nunca por más de 25 € por cabeza, y eso que tenemos el defecto de pedir siempre comida de más, siempre nos queda algo en el plato, y es que se nos van los ojos y pedimos demasiadas cosas aún sabiendo que no seremos capaces de terminarnos todo.
Todas las veces han estado preocupados por saber nuestras opiniones, dispuestos a adaptar los platos a nuestras necesidades(acompañar con verduras en vez de patatas algunas carnes o pescados, por ejemplo) y muy serviciales, sin caer en la pesadez.
En fin, el de Alberto ha sido todo un descubrimiento que seguiremos frecuentando, al igual que a sus vecinos de toda la vida, porque propuestas como estas en la ciudad, siempre son de agradecer y promocionar. Al menos, así lo haremos, creo que en esta vida siempre hay que sumar, y no restar!
Intentaré seguir comentando más posts tuyos, pues conozco un % muy alto de todos los sitios que describes. Muchas gracias por tus opiniones, que sepas que para gente como nosotros han sido y son muy útiles y nos han ayudado en más de una ocasión para decidir por qué lugar decantarnos a la hora de salir a comer/cenar. Enhorabuena y a seguir igual!
Gracias por el comentario, Santi. Espero tus aportaciones en futuros posts. Un saludo.
ResponderEliminarAcabamos de disfrutar de una agradable comida entre tres amigos. La lubina en hojaldre exquisita. El pulpo con grelos exquisito. Ahora vendran los postres. Simpatia y amabilidad. Ahora toca pagar, ya veremos a ver por donde salta la liebre.
ResponderEliminarJosé Luis:
ResponderEliminarNo nos dejes así. ¿Cómo acabó la cosa?
Hola!! Aunque con un poco de retraso sobre este post, he de decir que totalmente de acuerdo con la oponión de la comida, pero con respecto al local no sé si es que hacía poco que habían abierto y les faltaba algo, pero el ruído que había era un poco ensordecedor, de lo más molesto. Era tan grande el murmullo que había que estabas deseando terminar para salir. De todo esto hace unos 6 meses. Del resto no opino. Gracias por este fantástico post.
ResponderEliminarAyer cenamos en este restaurante, dónde la atención es exquista, la comida igual, con una variedad de platos que no sabes que escojer, ya que cada plato que se lee en la carta, asi como los que con tanta amabilidad nos expone alberto se convierten en un deleite para el paladar. Platos de calidad a buen precio y buen ambiente.
ResponderEliminarPero me gustaría resaltar lo que no nos gusto, que fue el ruido, demasiado ruido, no se si la acustica del local, no se a que se debía, pero era complicado escuchar a los de tu mesa por el ruido. Aqui es cierto que solemos gritar mucho, pero para mi gusto es un punto muy importante que yo personalmente revisaría, ya que siendo un sitio estupendo con unos platos exquisitos se agradecería menos ruido. Un saludo
estamos corrigiendo el problema del sonido en breve estara arregglado un saludo y gracias
ResponderEliminarpero vamos a dejar de hablar de tonterias. o bebedeiro lo montaron los padres de alberto. los platos que tenian en carta fueron creados por la madre de alberto. alberto hace dos años vendio o bebedeiro. y hace uno monto otro restaurante con el nombre meson el de alberto. quien copia a quien. por favor dejen de decir tonterias. pasen por el restaurante y degusten sus excepcionales platos. y dejen de decir tonterias. quien deberia de cambiar su carta es o bebedeiro. y el encanto de o bebedeiro antiguo y del meson de alberto solo lo tiene una persona por su trato con los clientes que es alberto. un saludo alberto y sigue con lo tuyo que la envidia es mala consejera por eso intentan calumniarte
ResponderEliminarEu son un veciño do barrio e traballo na hostelaría da cidade dende hai moitos anos. Fun moitas veces ao Bebedeiro e dende que abriu o de Alberto só volvín unha vez, e ao de Alberto coido que 4 ou 5. O trato é o que me fixo volver moitas veces (a agardo que sexan moitas máis), ademais da calidade dos pratos, dos que pode degustar un humilde servidor. Parabéns ao de Alberto
ResponderEliminarYO ERA ASIDUA AL BEBEDEIRO CUANDO LO LLEVABA ALBERTO,POR CIRCUNSTANCIAS DE LA VIDA ME FUI DE LA CIUDAD Y CUAL FUE MI SORPRESA CUANDO VOLVI,QUE YA NO LO LLEVABA EL.FUIMOS UN PAR DE VECES(POR QUE ERA MI FAVORITO Y LO RECOMENDABA 100%)PERO ME DESILUSIONE.ERAN LOS MISMOS PLATOS,SI,PERO MAL ELABORADOS.NI PUNTO DE COMPARACION.QUE DESILUSION¡¡¡POR ESO NO HE VUELTO NUNCA MAS.POR QUE LA ESENCIA DE ALBERTO EN LA COCINA DE EL BEBEDEIRO ....SE FUE CON EL.ASIQUE,SEÑORES,DE COPIA....NADA.TODO LO CONTRARIO,LOS NUEVOS DUEÑOS LO TUVIERON FACIL APROVECHANDO EL TIRON QUE TENIA EL BEBEDEIRO,SU FAMA Y SU CARTA.PERO........NADA QUE VER.MENOS MAL QUE ALBERTO MONTO EL MESON Y......SUPO DARLE ESA COSA ESPECIAL QUE TIENE SU COCINA,ADEMAS DE SIMPATIA,ATENCION Y UN SERVICION GENIAL.
ResponderEliminarYo sin entrar en profundidades de un dueño o el otro, diré que soy alergica al queso y cuesta muy mucho, escojer un plato que no lleve queso.De entrantes solo probé el scampi, que esta buenisimo....el resto rociado de queso.
ResponderEliminarConocimos a Alberto hace muchos años en su anterior restaurante. Cuando nos traía la carta y nos decía "además de lo que veis en la carta tenemos....." empezábamos a soñar. Perfecto!! Su pasión al describirnos los nuevos platos SIEMPRE se correspondía con lo que luego disfrutábamos.
ResponderEliminarAhora vuela libre en el suyo, El de Alberto, y supera lo que ya era difícilmente superable. Cocina gallega, con productos tradicionales de temporada, de mercado, llevados a la excelencia. Vieiras, zamburiñas, calamares, arroces, chocolates, arroz con leche, piña, langostinos....., todo reconocible en el plato, con sus mejores sabores. Pero Alberto y su gente los hacen brillar con su trabajo, su talento, su dedicación, su innovación y su respeto por el cliente. El de Alberto se merece un escenario como Galicia, y Galicia se merece el reconocimiento y el talento de gallegos como Alberto.
Déjate guiar por él. No lo olvidarás. Será de las mejores fiestas para los sentidos de tu vida.
Atención en el local, la mejor. Precio, barato para la calidad y el trabajo que te brindan. Equipo, la amabilidad más encantadora.
Riquísimo!!
ResponderEliminarAyer cenamos por primera vez en El del Aberto, después de haber ido en varias ocasiones al Bebedeiro. Nos deleitamos con el fuera de carta: Cucuruchos de crema de vieiras y pulpo, entrante, y como plato principal, calamar de la ría y risotto (delicioso), y salmonete sobre carpaccio de cigalas. Finalizamos con el mismo postre que tomó Pantagruel, la oda gallega al tiramisú, y acompañamos con un vino de Godello.
La cuenta fueron 64 €, muy bien pagados, porque estaba todo Riquisimo!!!
Pantagruel, hay que especificar mejor, porque hablas de 64 € que no te pareció caro "estaba todo riquísimo" pero falta el nº de comensales: 1? 2? 3? 4?...
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