Restaurante Ocean (Culleredo)
Fue el propio Pablo Novoa quien nos guió a la hora de elegir entre las opciones de una carta compuesta únicamente por mariscos, pescados y arroces. Y su consejo nos llevó a optar por la plancha para los entrantes: almejas y navajas. Las primeras estaban, simplemente, sobresalientes: hermosas y sabrosas, con la sencillez de un paso por la plancha en compañía de laminas de ajo bien doradas. Magníficas. A su lado, las navajas - demasiado tiempo cocinándose, para mi gusto - pasaron más bien desapercibidas.
Pese a la oferta de pescado del día - lubina, rape, lenguado -, nos decantamos por un arroz de marisco. Abundante y jugoso, venía muy bien acompañado por bogavante, nécoras, almejas, mejillones y cigalas (y quizás demasiado acompañado por sal).
A los postres, las propuestas de la casa: tarta de dulce de leche y tarta de chocolate con nueces, ambas correctas.
Y, antes de cerrar, una mención especial al extraordinario pan de Carral, mollete esponjoso fantástico para mojar en el juguito de la plancha y en el caldo del arroz.
Lo peor vino al final. La cuenta, con una botella de Coto de Gomariz - Ribeiro blanco -, llegó a los 106 euros. El arroz - 36 euros - tenía un precio muy razonable, vista la preparación y el tamaño de la ración. Normales también los postres y el vino. Pero el desequilibrio - en mi criterio - vino por los primeros: 24 € las almejas y 14 € las navajas, más su IVA. Francamente, creo que en Galicia por más de 100 euros la pareja se pueden tomar cenas memorables: y ésta fue buena, pero no memorable.
Bufff! Como dices, el arroz tiene buena pinta, pero por cincuentaypico euros por cabeza hay en Galicia muchas alternativas más originales, con productos de primera y muy probablemente sin esos pequeños fallos que mencionas.
ResponderEliminarEspero que el próximo fin de semana nos deje un buen ejemplo de lo que digo.
Es la característica de los restaurantes de Pablo Novoa. El sablazo.
ResponderEliminarHola manoel,
ResponderEliminarEs lamentable que esos precios nos limiten las veces que nos dejaríamos caer por determinados sitios, pero si coincido con el anónimo en que Pablo Novoa, tiende a alzar algo los precios.
De todas formas, creo que el precio se compensa, con un resultado altamente satisfactorio de la "¿delicia gastronomica?"
Pero, también opino, al igual que gourmet, que por mucho menos precio se puede cenar estupendamente, sin vaciar el monedero.
Hay que dejar algo en él para la próxima salida.
El señor que se menciona en este post es un conocido deudor de acienda y respectivos proveedores
ResponderEliminarManoel, el Ocean ha cerrado dónde irá ya...
ResponderEliminar